martes, 13 de enero de 2009

Poemas I

martes, 13 de enero de 2009
Soledad,
amiga, confidente, compañera.
Unida siempre a mí.
Unida como la raíz a la tierra.
Caminas junto a mí sin soltar jamás mi mano,
que se aferra a la tuya con fuerza.
Fiel amante,
que apagas mis noches y enciendes mis días.
Soledad,
amiga, confidente, compañera.
Unida siempre a mí.
Unida como la arena al mar.
Vives dentro de mi ser
amansando aquél latir de mi corazón.
Exigente estado
que requies mi velo incesantemente.
Soledad,
amiga, confidente compañera.
Unida siempre a mí.
Unida como el calor al fuego.
Escuchas mi llamada
y acudes presta a ella.
Celoso sentimiento
que rechazas a tus iguales.
Soledad,
amiga, confidente, compañera.
Unida siempre a mí.
Unida como el aire al viento.
Alumbras mi destino
orientando mis pasos hacia ti.
Por siempre...
Soledad

2 comentarios:

Almendra Puck dijo...

Muy bonita. Te acuerdas de cuando cantamos en el instituto aquella canción de George Moustaqui, "Le meteque" (o algo así)? Pues hay otra de este mismo cantautor, "Ma solitude", preciosa, que recuerda un poco a tu poesía. Escúchala.

Anónimo dijo...

La soledad se agradece en muchas ocasiones, pero siempre se le da más importancia a lo que no se tiene. Yo estoy muy solo y amo y disfruto mis placeres en mi intimidad, pero cuando piensas bien sabes que algún chiquillo correteando quizás no sería mala idea, pero en ese caso, ¿estaría menos sólo? Piensa en ello...
Creo que los que nacimos solitarios morimos solos, por muy bien acompañados que estemos en el lecho de muerte